Otra vez en casa. Lionel Messi volverá a jugar en su tierra, en su país, ante su gente y con la camiseta más linda del mundo, la de la selección argentina. Esta es la gran noticia del día para el país futbolero. La reaparición del astro rosarino en suelo albiceleste se consumará esta noche, a las 21.10, en San Juan, en el estadio del Bicentenario, en el amistoso ante Nicaragua, en la última escala previa al debut en la Copa América de Brasil. “Alguien dijo alguna vez que yo me fui de mi barrio, pero cuándo, cuándo, si siempre estoy llegando”, expresó Aníbal Troilo, en una frase que pinta con claridad lo que significa el sentido de pertenencia a un lugar específico en el mundo. Y el lugar en el mundo de Leo es la selección y jugar en su país ante su gente. Hoy se reeditará este romance irrompible.

Ayer por la tarde en esta capital de la provincia cuyana el cielo estaba nublado, la temperatura templada y la enorme expectativa del público quedará reflejada hoy en un estadio repleto de hinchas, en especial que irán a ver las travesuras de Messi. Los tonos marrones, dorados y ocres del paisaje otoñal sanjuanino hoy se completarán con los colores albicestes de la camiseta del equipo de Scaloni, en lo que será un amistoso con formato de práctica a puertas abiertas porque a nadie le importará el resultado, pero sí el funcionamiento.

Hay que recordar que el crack rosarino amagó con pegar el portazo a la selección tras lo que fue el traumático mundial del año pasado en Rusia, en que el equipo de Jorge Sampaoli fue un manojo de problemas y quedó en el camino ante el luego campeón Francia en la fase de octavos de final. Allí el diez avisó que no volvería a ponerse la camiseta de la selección tras una nueva frustración personal y colectiva. Pero el amor es más fuerte y esta noche el Rey Sol volverá a iluminar con su juego la noche sanjuanina.

Lo que no se puede soslayar es que ahora sin la presencia por lesión de la estrella brasileña Neymar, que además en los últimos días estuvo envuelto en una grave denuncia sexual, se acentúa la supremacía de Lionel Messi como la máxima estrella de la Copa América.

Messi había jugado por última vez en Argentina con la camiseta de la selección en la despedida previa al Mundial de Rusia, en mayo del año pasado, en la victoria 4 a 0 ante Haití en La Bombonera (29/5/18). Luego llegó la decepcionante presentación mundialista y el anuncio de alejamiento. Pero este año Leo aceptó el desafío de volver a lucir la albiceleste y lo hizo en la derrota 3 a 1 ante Venezuela en Madrid, en marzo, ya con Scaloni como nuevo DT. El diez ahora va por la Copa América y en esta etapa preparatoria hoy reaparece en suelo argentino ante Nicaragua.

En la antesala del juego de hoy a Messi se lo notó distendido, feliz, contento con su regreso a la selección. En la práctica formal que jugó ante Newell’s el sábado pasado en Ezeiza compartió fotos con los jugadores del club en que pasó por inferiores y prefirió no ahondar sobre lo que hará a futuro, en cuanto a si volverá alguna vez a ponerse la rojinegra. El sueño pendiente está, pero el tiempo dirá si el Coloso será testigo de sus gambetas.

Por lo pronto hoy está compenetrado con la selección y la Copa América de Brasil, justamente un Brasil que está convulsionado por la marginación de la estrella Neymar por lesión del torneo continental. Ante esta ausencia Leo se consolida, más que nunca, como la máxima atracción de la competencia. Argentina lo necesita encendido, iluminado, feliz, y así parece estar el rosarino ante otro gran desafío. El mejor de todos vuelve a jugar en casa.