Esta mañana los fiscales del MPA brindaron aclaraciones a la prensa sobre la investigación del crimen de Diego Román, ocurrido en Recreo. La fiscal Ana Laura Gioria, sostuvo que "desde el primer momento del hallazgo se tomaron todas las medidas de rigor de preservación del cuerpo y del lugar, se lo derivó a la morgue, y el informe preliminar fue entregado el jueves siguiente".

Más adelante indicó que "del mismo procedimiento se extraen muestras de laboratorio para análisis y en este caso se preservaron muestras de pasto y plantas que rodeaban al cuerpo y esto va a ser analizado en otro laboratorio distinto y estamos esperando esos resultados".

Además la funcionaria informó que "se convocó a un equipo multidisciplinario de Gendarmería para que evalúen nuevamente el material que se registró de la autopsia, que consiste en los videos, las fotografías, estudios radiológicos y se verá a criterio de ellos si es necesario algún otro tipo de intervención. Estará formado por forenses, bioquímicos, radiólogos, entomólogos, anatomopatólogos, médicos forenses, bioquímicos y especialistas en ADN que harán un re examen de la evidencia integral".

Cabe recordar que este martes 16 de julio se cumplen 13 días del asesinato del pequeño y hasta el momento no hay detenidos. 

Los testimonios de los maltratos 

El abogado que asiste a la madre de Diego Román, contó que una hermanita de la víctima declaró bajo el método de la Cámara Gesell y reveló los cruentos maltratos que recibía el chico por parte de su padre y de su madrastra. Confió que le daban “cintazos” y “baños de agua fría en invierno”, entre otras crueldades.

Dionisio Ayala Fernández, el abogado que asiste a la madre del niño asesinado en la zona rural de Recreo el pasado 4 julio, expuso que una de sus hermanitas admitió que sufría maltratos físicos y psicológicos crueles.

Según publica el medio SL24, la declaratoria de la joven de 14 años fue en una Cámara Gesell que se llevó a cabo en Tribunales y en la que no sólo apuntó a Román como víctima, sino a los cuatro hermanitos, identificando a su padre y a su madrastra como los autores de los maltratos.

“Ella describió prácticamente, con sus palabras, la violencia psicológica y física, cometida por ambos”, sostuvo Ayala Fernández sobre lo que contó la niña. “No solamente eran castigos corporales sino también a través de la retención de comidas”, agregó.

El letrado además señaló que la madrastra bañaba a Diego y sus cuatro hermanos con agua fría en pleno invierno. “Ella -por la madrastra- tiene cuatro hijos a los cuales no les hacía nada, pero sí a los del señor Román que prácticamente estaban sufriendo todas las consecuencias e iras de esta mujer“, destacó.

“Contó además que un día el padre mató a golpes a Diego con cintazos. Si no lo salvaba un hermano, le seguía pegando con un cinto de cuero”, indicó Ayala Fernández.

El abogado también destacó que la niña volvió a confirmar una hipótesis que sigue una línea investigativa y que apunta al entorno familiar del niño asesinado.

“Manifestó que ese día que desapareció Dieguito, cerca de la cancha de fútbol en la que estaba, quien se encontraba allí era precisamente la madrastra. Y Diego habló con unos amiguitos y dijo «ahí viene mi madrastra y salió corriendo para el lado del monte»”.

“Ese es el temor que tenían prácticamente los chiquitos por la violencia ejercida por la madrastra y su padre”, sentenció el abogado que próximamente se constituirá como querellante en la causa.