Este 13 de septiembre se cumplen cuatro años de la explosión de la panadería ubicada en J.J. Paso y 4 de Enero que terminó con la vida de la joven Antonella Olmedo, fallecida el 15 de septiembre de 2015 a raíz de las quemaduras en el 65 por ciento de su cuerpo producidas por el siniestro.  

Vale recordar que las partes resolvieron la situación judicial en un juicio abreviado en mayo pasado, donde se resolvieron penas de cumplimiento condicional por el delito de estrago culposo: a 3 años de prisión para Nadia Sánchez, encargada de los locales de venta de la panadería y quien tenía a su cargo a los empleados; y a 2 años y 6 meses tanto para el titular de la panadería y para el propietario y administrador del local en el que se produjo la explosión, Nicolás Colella, y Martín Wexler respectivamente; mientras que Gustavo Arreguez, titular de un maxiquisco lindero, fue sobreseído.

Cómo las penas son a 3 años de prisión o menos, el delito se considera excarcelable.

La carta

En este aniversario, Marcela Olmedo publico un sentido mensaje a través de su cuenta de Facebook que a continuación reproducimos.

"Hoy se cumplen 4 años de ese día que no hubiese querido que llegara. 4 años de ese almuerzo familiar en la casa de la abuela al que no pudiste quedarte porque tenías que ir a trabajar.

¡Quién iba a decirme que esa charla de las 17 y pico sería nuestra última charla! Algo le avisaba a mi corazón cuando sin saber lo que pasaba me senté en la cama, empecé a revolver mi cartera y a llorar, creía yo sin razón, porque le dije a Ara que tenía algo en el pecho y no sabia por qué.

Y era esta pésima noticia, mi amor. ¡Esa que no quise recibir nunca! 

Por una conexión de gas irregular, sin el tapón de seguridad y a pocos centímetros de una instalación eléctrica, al querer desenchufar el mata insectos, una explosión te produjo quemaduras en tu cuerpo.

¡Por una cadena de irresponsabilidades hoy no te tengo más!

Pero voy a seguir siempre confiando en Dios con toda mi fe que así será y vos tendrás la Justicia, Antonella. La Justicia de Dios porque la de los hombres no exisitió para vos.

¡'Mientras vivia no voy a dejar que se olviden!

Ellos me convirtieron en una madre del dolor que no pidió serlo, sino que ellos me llevaron a este sufrimiento por su falta de compromiso, de cuidado y de humanidad. Pero no se van a olvidar porque jamás podrán sacar de sus mentes que son asesinos. 

Destrozaron tus sueños, me destrozaron la familia....

Hoy soy una madre que sobrevive pero estas fuerzas que Dios me da cada día para seguir serán el motivo para continuar mi lucha, nuestra lucha. 

Las leyes y quienes tienen el deber de impartir y defender lo justo no nos permitieron verlos presos a los responsables de tu muerte. Nadia Sánchez (encargada de la firma), Nicolás Francisco Colella (dueño de la industria panaderil) y Martín Wexler (Propietario del local), ellos solo cumplen penas de ejecución condicional en suspenso y tareas comunitarias. Eso fue lo que conseguimos. Ellos se declararon culpables pero no pagan tu muerte, siguen trabajando, disfrutando de la vida y vos no.

Eso no es Justicia.

Que ese Dios que un día te pidió de regreso al cielo me permita ver su Justicia Divina porque de esa no escaparán".

Los hechos

Antonella Olmedo murió el martes 15 de septiembre de 2015 a raíz de una falla multiorgánica producida por las quemaduras que sufrió en el 65 por ciento de su cuerpo. 

Según la fiscalía, la explosión que le produjo las lesiones ocurrió entre las 19:30 y las 20:15 del domingo 13 de septiembre como consecuencia de una pérdida de gas natural –que habría sido informada en febrero y en mayo por otras empleadas a la encargada de la empresa– de una boca de alimentación sin artefacto conectado y sin tapón epoxi obturador de seguridad. El gas produjo la ignición al entrar en contacto con una chispa que se produjo cuando la joven fallecida desenchufó una lámpara eléctrica mata insectos.

 La deflagración generó la caída del cielorraso, rotura de vidrios, desprendimiento de las puertas de ingreso a la panadería y a los dos locales contiguos, afectación de enseres y mercaderías y corrimiento de los muebles de su lugar.

Además del fallecimiento de la joven, otras seis personas que estaban en el quiosco ubicado en el local número 3 y en la vía pública sufrieron lesiones de distinta consideración.