La Policía alemana informó hoy de la detención de una persona presuntamente vinculada con el tiroteo en la ciudad de Halle, al este de Alemania, en el que murieron al menos dos personas, una mujer y un hombre. Según el periódico “Bild”, el tiroteo se produjo alrededor del mediodía en las cercanías de una sinagoga y el hombre habría lanzado además una granada de mano en el cementerio judío.
En las imágenes grabadas por una cámara de seguridad se puede ver cómo un hombre con la cabeza cubierta por un casco baja de un volkswagen gris en plena calle y comienza a disparar. En otras fotografías tomados por los vecinos del barrio, un hombre de apariencia similar dispara a las puertas de una Kebap.
La Policía local de Halle anunció el incidente en su perfil de Twitter, donde confirman que se han producido dos víctimas mortales y ha pedido a los ciudadanos que no salgan a la calle. A pesar de la detención de un sospechoso, la Policía mantiene la alerta y no descarta que haya un segundo hombre implicado en el suceso.
De hecho, algunos testigos explicaron al diario “Bild” que se trataría de dos hombres vestidos con ropa de camuflaje y con armas largas y cortas. La estación de tren ha sido cerrada por precaución y las autoridades han informado de que están desplazando a todos sus efectivos a la zona.
Asimismo, las autoridades investigan también un tiroteo que se habría registrado en la localidad de Landsberg, situada a unos 15 kilómetros de Halle, según ha confirmado un portavoz policial. Por el momento, se desconoce si guarda relación con el incidente de Halle y no ha trascendido si se han producido víctimas o detenciones.
El ataque tuvo lugar durante la celebración del Yom Kipur, o Día de la Expiación, la celebración más sagrada para los judíos. Durante esta festividad, las sinagogas celebran servicios religiosos durante todo el día que incluyen lecturas de la Torá.
Inicialmente, las fuentes policiales de Halle hablaron de un único agresor -un hombre-, mientras que poco después partían ya de la base de que se trataba de varias personas.
Testigos en Halle han contado que uno de los asaltantes llevaba equipación de combate y estaba armado con una pistola automática. "El hombre llegó hasta la tienda de kebab. Vestía un pasamontañas y portaba un fusil de asalto", ha explicado a la cadena n-tv un testigo. "Lanzó una grada, que rebotó frente a la puerta y estalló delante de otra persona en el suelo", ha precisado.
Según la información del diario “Mitteldeutsche zeitung”, todas las unidades policiales disponibles están siendo trasladadas a Halle. También informan de que se asumen la operación como “situación especial” y que aún se desconoce si hubo un intento de matanza o un ataque terrorista. Tampoco queda claro qué tipo de arma de fuego se ha usado. Algunos medios hablan de “ametralladoras”.
Un testigo presencial que se encontraba en el local ha relatado a ese canal que el agresor iba en traje militar, con un casco o máscara, y que llevaba un arma automática y lo que parecía una granada de mano.
De acuerdo con el relato de este ciudadano, en el momento del ataque se encontraban en el local unas cinco o seis personas y el atacante tenía un comportamiento "muy marcial".
Fuente: La Vanguardia
