Los choferes de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) de Santa Fe cumplen hoy 10 días de paro por tiempo indeterminado en reclamo de deudas salariales en abril, mientras que el gobierno provincial y los municipios piden asistencia del Estado nacional por considerar "que no queda otra salida".

Para analizar la situación, los intendentes de Santa Fe Emilio Jatón, de Rosario Pablo Javkin y el de Paraná Adan Bahl, tuvieron anoche en encuentro virtual  en el que decidieron remitir un documento conjunto al jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, para solicitar la intervención.

"No hay modo de que esto se pueda resolver desde los municipios y es lo que se planteó; dependemos de que se incluya al transporte en el programa de Asistencia al Trabajo y Producción (ATP) o de una modificación de los subsidios al boleto, que tras la pandemia no tuvieron ninguna evolución", aseguró Javkin al respecto en comunicación con la agencia informativa Télam.

Y ejemplificó: "El sistema de transporte público urbano e interurbano se financia en un 45% con subsidios de la Nación, la provincia y el municipio, mientras que 55% proviene de recaudación propia; antes de la pandemia viajaba 450.000 pasajeros y hoy, 62.000". 

En línea con los intendentes, el secretario de Transporte de Santa Fe, Osvaldo Miatello, en declaraciones a Radio2 de Rosario, consideró "que es necesario un gran acuerdo entre todas las partes, sobre todo del Gobierno nacional". 

"Los sueldos a abonar representan cifras siderales por fuera de las posibilidades de los gobiernos provinciales y municipales, y los ATP, podrían representar una salida del conflicto", evaluó.

El conflicto comenzó porque los choferes, cobraron en mayo el 50% de los haberes de abril.

"Hoy fue depositado un 15% más, que lleva los pagos a 65% del total, una cantidad insuficiente para volver a trabajar", dijeron desde el gremio.

Tanto UTA como la cámara empresaria del transporte automotor de pasajeros se encuentran reunidos con autoridades del Ministerio de Trabajo de la Nación para intentar llegar a un acuerdo que levante la medida de fuerza que tiene sin servicio a la ciudad desde el 10 de mayo.