Diputados provinciales que integran la comisión de Seguimiento de Vicentín objetaron ayer al nuevo directorio de la agroexportadora en concurso preventivo de acreedores, ungido el jueves pasado en asamblea de accionistas, al que consideraron un apéndice de la conducción señalada desde un principio como la responsable de una crisis todavía con final abierto.

“Los miles de millones de dólares que deben (los anteriores administradores de la cerealera) siguen sin aparecer y el nuevo directorio es el mismo perro con distinto collar”, aseveró el diputado justicialista Luis Rubeo, titular de la comisión. Y recordó que el pedido de intervención de Vicentín por parte de la Casa Gris continúa aguardando una resolución del juez Civil y Comercial Nº 2 de Reconquista, Fabián Lorenzini.

Rubeo también advirtió que la asamblea de accionistas “aprobó un balance (2019) mentiroso”, al tiempo que no descartó que la comisión de diputados solicite una entrevista al nuevo directorio del grupo. “Lo primero que debería hacer es aclarar dónde está la plata que falta”, enfatizó a La Capital.

La asamblea de accionistas de Vicentín —en concurso desde febrero— nombró el jueves un flamante directorio. También aprobó el balance del año pasado, una pieza clave para interpretar la debacle de la compañía. Pero tanto la polémica rendición de cuentas como los perfiles de los nuevos conductores potenciaron las críticas de los legisladores.

“La empresa más grande de la provincia fue vaciada con complicidad política nacional y el destino de millones de dólares del pueblo argentino sigue siendo un pesado misterio”, alertó el diputado Carlos Del Frade (Frente Social y Popular-Ciudad Futura), quien calificó al nuevo directorio de Vicentín como “otra postal de impunidad”.

Rubén Giustiniani (diputado de Igualdad) sostuvo que, “a pesar de cambiar de nombres en la conducción, lo que no se modifica es la sustancia de lo inexplicable, de cómo una empresa que tuvo en los últimos años una rentabilidad positiva llegó, en 2019, a un pasivo de 1.350 millones de dólares”.

Al frente de la agroexportadora quedaron Omar Scarel (contador de Vicentín desde hace 30 años), Daniel Foschiatti (Servipack, allegado al fallecido CEO de la cerealera Sergio Nardelli) y Estanislao Bougain (abogado ligado a la firma).

Paralelamente, la comisión de Seguimiento de Vicentín se entrevistará mañana con el fiscal rosarino Miguel Moreno, quien inició una investigación a fin de esclarecer si el default en el que cayó la firma fue consecuencia de maniobras ilícitas llevadas adelante por los directivos renunciantes.

Días atrás, el presidente Alberto Fernández fue citado por Moreno para que preste declaración como testigo en el expediente.

Fuente: La Capital