Nueve bomberos civiles han muerto y uno se encuentra herido tras el colapso de una cueva en la localidad de Altinópolis, en el estado brasileño de Sao Paulo, según informaron ayer domingo las autoridades locales. 

El alcalde de la localidad de Batatais --de donde son al menos siete de los nueve fallecidos--, Juninho Gaspar, ha decretado tres días de luto oficial. "Es una tragedia sin precedentes", ha lamentado Gaspar en declaraciones recogidas por el diario 'Folha de Sao Paulo'. 

Los fallecidos formaban parte de un grupo de 28 personas que realizaba un entrenamiento para bomberos civiles en una gruta. Las 18 personas restantes pudieron escapar del siniestro sin heridas de gravedad. 

Según ha confirmado Gaspar, los fallecidos trabajaban como bomberos voluntarios, y habían ayudado a apagar los incendios que golpearon la región hace poco más de un mes. Las operaciones de rescate se han visto complicadas por las lluvias y el difícil acceso a la zona. 

De los nueve cuerpos, cinco han podido ser transportados en helicóptero, pero el resto deberán ser recuperados a pie debido a la baja visibilidad. 

El gobernador de Sao Paulo, Joao Doria, ha confirmado en un mensaje en la red social Twitter que el departamento de Bomberos del estado había logrado finalizar con las labores de rescate. "Mis condolencias a la familia y amigos de los nueve bomberos civiles que perdieron la vida en esta tragedia", ha escrito Doria. (Notiamérica)