Luego de los graves incidentes que se registraron en la noche del miércoles en el barrio 2 de Abril, se supo que en las últimas se presentó un joven de 20 años, identificado por las siglas N.S., quien sería el que acompañaba al menor de 13 años que está acusado de haber violado al niño de 8 años en un descampado del barrio.  Si bien este joven no habría participado del acto de abuso en forma directa, se investiga qué rol tuvo en el aberrante episodio.

Este joven se entregó acompañado por su madre y quedo a disposición de la Justicia, detenido en la Alcaidía local. Por esta presentación ahora sí el MPA toma intervención, aunque hasta ahora  el principal acusado sigue siendo un menor que se encuentra en edad no punible, por lo cual interviene directamente la Secretaría de los Derechos de la Niñez y Familia. Ese menor está ahora en Buenos Aires, alojado en un instituto terapéutico especializado, mientras que su familia tuvo que ser sacada del barrio y de la casa en la que residía, objeto de varios  ataques por parte de vecinos.

Por otra parte, la Unidad Regional V dio a conocer un comunicado oficial en el que explicó los alcances del operativo montado el miércoles en el barrio, que terminó con gravísimos incidentes y una fuerte represión policial con balas de goma. Allí, la policía menciona que hay 7 efectivos heridos por pedradas y arrojamiento de objetos contundentes, y también reconoce que el traslado de la familia objeto del ataque se produjo en el momento de los incidentes.

Dice el texto del comunicado, en forma textual:

Con motivo de un hecho de abuso sexual que investigan los organismos competentes, del que fuera víctima un menor de edad, e involucrado otro menor, como así la presunta participación de un tercero; en la noche del martes se implementó un importante operativo policial de custodia a una vivienda del Barrio 2 de Abril de la ciudad de Rafaela, domicilio del menor involucrado, y los familiares que habitan en ella, luego de conocerse que habría recibido daños.

En la víspera, habiendo tomado conocimiento sobre la organización de una manifestación en la Plaza central del Barrio, en repudio al hecho; el Jefe de la UR V dispuso un operativo mayor, afectando un importante recurso humano, no sólo de Rafaela, si no del Departamento, en pos de resguardar a la familia del implicado, que se negaba a abandonar el inmueble, pese a la intervención de autoridades locales que buscaron otras alternativas.

En dicha protesta, se agruparon varias personas que, tras quemar cubiertas, se acercaron al sector del operativo y comenzaron a clamar la presencia del Fiscal interviniente, cómo así también que la familia en cuestión se retirase del Barrio.

Arrojaron piedras y otros objetos contundentes a la finca y luego al personal policial apostado en el lugar, también encendieron basura a escasos metros del cordón de contención que formaban.

En principio no se adoptó ninguna medida hacia las agresiones de un gran número de los manifestantes, optando por contener en formación y soportar el arrojamiento de trozos de mampostería; no obstante ello, y al continuar las agresiones hostiles, y correr riesgo la integridad del personal policial actuante, el responsable de la Unidad Regional Vta, tras un análisis de riesgo de la situación, dio la orden de restaurar el orden público en forma proporcional y progresiva.

Mientras se desarrollaban los incidentes, se logró convencer y evacuar a la familia, quienes fueron trasladados fuera del Barrio.

También pudieron individualizarse a algunos involucrados referentes en la manifestación.

Resultaron aprehendidos y posteriormente detenidos por directiva fiscal tres individuos, de 20, 24 y 29 años; y un menor de 17 fue demorado en resguardo.

Producto de la agresión recibida, siete de los efectivos policiales actuantes resultaron lesionados. Uno de ellos sufrió fractura en el hueso cigomático (orbital ojo izquierdo), otro un desgarro en uno de sus miembros inferiores; los restantes, escoriaciones, heridas cortantes, golpes y hematomas varios. Así mismo, una de las unidades móviles comisionadas en el sector sufrió daños.

Se menciona que mientras se dispersada y desplegaban los grupos de Agrupación Cuerpos, en un sector del barrio se escucharon detonaciones de arma de fuego, por lo que el personal debió resguardarse tácticamente.

Se informa que el operativo, iniciado el martes, se mantendrá hasta tanto la vivienda de calle Echeverría al 1600 sea desocupada en su totalidad.