La historia de como desbarataron una banda de vendedores de pastillas, drogas sintéticas en Rosario, con un laboratorio en Roldán para fabricar éxtasis .
Tras la caída del suboficial Nicolás Balzi y su novia uruguaya Gabriela Celia T.H., efectivos de la División Antidrogas Rosario de la Policía Federal continuaron investigando la línea de distribución de los vendedores de éxtasis, drogas de diseño y cristal en gimnasios y fiestas electrónicas muchas en el salón Metropolitano de Rosario.
Los procedimientos fueron concretados este miércoles por personal de la Policía Federal, que detuvo a 8 personas, entre ellos a un policía y a un hombre que vivía en un importante condominio y distribuía las drogas a bordo de un BMW, y a la pareja de éste.
Se realizaron 14 allanamientos en la región en las que fueron detenidas siete personas, dos de ellas mujeres. Según la investigación la banda es liderada por un hombre apodado “Emi Trix”, con residencia en Condominios de Refinería, y un policía con diez años de servicio, Leandro Miranda, cuyo padre fue jefe de policía de Rosario y San Lorenzo.
Uno de los operativos se realizó en el country Kentucky, en Funes, en el domicilio de un joven, hijo de los empresarios dueños de una cadena local de supermercados de la Ciudad de Rosario.
Los federales lograron secuestrar alrededor de 130 gramos de polvo MDMA (o éxtasis), 2.622 pastillas de éxtasis, 28 troqueles de LSD, 155,9 gamos de cristal, 170 gramos de cogoyos de marihuana, 3 pistolas calibre 9 milímetros (dos Bersa y una Browning), municiones, 823 mil pesos, 1200 dólares, 200 euros y 5 balanzas de precisión. Para tener una dimensión del negocio, cada una de las pastillas de éxtasis tiene un costo que ronda los 2 mil a 3 mil pesos.
Drogas sintéticas en fiestas electrónicas
En una entrevista en la revista del 14/07/2021 viva a Hernán Cattaneo ante la pregunta si En Argentina este tema nunca se manejó como se debía y eso llevó a la tragedia de Time Warp. respondió que fue la tragedia más grande de la música electrónica y una de las más tristes de la música en general, sobre todo porque era algo totalmente evitable. En Europa hay espacios donde podés testear la calidad de lo que estás por consumir, así se reduce la posibilidad de consumir algo que no sea lo que suponés que es. Acá se optó por otra cosa: como está prohibido, de eso no se habla. Así se van poniendo las cosas debajo de la alfombra hasta que un día te estallan en la cara. Y pasó lo que pasa siempre en Argentina: empezó a opinar gente que no sabe nada, se demonizó la música electrónica, se intentó culpar a la música por la negligencia y la falta de control y de información.
Es el mismo Cattaneo que tocaría en Rosario y en Córdoba y los investigadores sabían que la banda estría preparada con cargamento para poder estar en los VIP (así era como actuaban) y poder distribuirlas. Cada VIP en esas fiestas rondan en los $500.000 y es para 10 personas, así operaba la banda.
Los procedimientos fueron concretados por personal de la Policía Federal Argentina (PFA), a pedido del fiscal federal de Rosario Javier Arzubi Calvo y de la Procuraduría de Narcocriminalidad (Procunar), y en las viviendas allanadas, entre ellas un departamento en un condominio de lujo y una casa en un country, se secuestraron cerca de 5.500 dosis de distintas sustancias, armas y más de 800 mil pesos y 1200 dólares en efectivo.
Según los investigadores, la causa en la que fueron detenidos los sospechosos se inició en febrero último con el arresto de otro policía, llamado Nicolás Balzi, un suboficial de la fuerza santafesina, en cuyo poder se incautaron 30 pastillas de éxtasis.
En aquella oportunidad se determinó que Balzi se dedicaba a comercializar los estupefacientes en fiestas electrónicas, por lo que el juez federal 3 de Rosario, Carlos Vera Barros, ordenó su detención.
Balzi era un egresado del Instituto de Seguridad Pública (Isep), donde en diciembre del 2020 culminó sus estudios y, según la investigación, en marzo del 2021, este suboficial fue contratado para desempeñarse como policía miembro de la comisaría 2a.de Cañada de Gómez, a 70 kilómetros de Rosario.
En febrero, cuando se produjo la detención de Balzi, se comprobó que éste comercializaba éxtasis y cristal, en dosis que iban, en el caso del cristal hasta 20 mil pesos el gramo, y las pastillas de éxtasis a 2 mil por unidad, según detallaron las fuentes.
El juez federal Vera Barros continuó la pesquisa y este miércoles ordenó los nuevos operativos, en los cuales los efectivos de la PFA concretaron las detenciones de quienes fueron sindicados proveedores de las drogas sintéticas.
Los procedimientos se realizaron en inmuebles de la ciudad de Rosario, entre ellos un departamento en un lujoso condominio, uno de la localidad de Roldán y el restante en una casa del country Kentucky, en la localidad de Funes. El principal allanamiento se realizó en el departamento 1 de la Torre 3 del Condominio del Alto que se ubica en la calle Vélez Sarsfield 510, de Rosario, donde fueron detenidos Emilio Martín Tiresa y su novia instagramer de nombre Julieta Valenzuela.
En el departamento allanado, la policía encontró unos 600 mil pesos, una suma en dólares y en euros, como así también marihuana, éxtasis, una pistola calibre 9 milímetros, dos teléfonos celulares y un automóvil BMW que, según los investigadores, era el que utilizaba habitualmente el detenido para realizar las entregas de las drogas.
“Emi Trix” era un monotributista clase C y fue considerado por los investigadores como el líder de la organización criminal y hasta fue sindicado como el encargado de realizar las maniobras de extorsión y apriete de los clientes que mantenían deudas. La investigación realizada por la fiscalía determinó que “Emi Trix” utilizaba en muchas oportunidades las redes sociales para coordinar la venta y las entregas de la drogas, para lo cual cumplía un rol fundamental el perfil de su novia instagramer, con casi 13 mil seguidores.
Otro de los allanamientos realizados por la PFA se llevó a cabo en una casa de la calle San Lorenzo al 1600, de Rosario, donde se secuestraron 1300 pastillas de éxtasis con la inscripción “Instagram”, casi 1000 pastillas con la forma de un auto rosa y centenares de dosis de otras drogas de diseño.
Otro de los lugares allanados fue una casa ubicada en la calle French al 1400, de Rosario, donde fue detenido el policía Leandro Walter Miranda, donde fueron secuestrados casi 150 mil pesos, unos mil dólares, marihuana, armas de fuego, computadoras y dos teléfonos celulares.
La sospecha de los pesquisas es que el oficial Miranda era el responsable de la producción de pastillas que vendía Balzi, ya que se lo acusa de haber montado una “cocina de drogas” en la localidad vecina de Roldán. Este policía, de 33 años, trabajaba en una comisaría de la localidad santafesina de Peyrano y es hijo de un exjefe policial de Rosario.
En el resto de los allanamientos se secuestraron otras 4000 pastillas de diversos colores y formas, valuadas 10 dólares cada una, con logotipos o impresiones tales como Instagram, Rolls Royse, Back to the Future, Mastercard, Visa y otras. También se hallaron cristales de metanfetamina, planchuelas de LSD y cogollos de marihuana, se desmanteló un vivero de cannabis y se decomisaron tres pistolas semiautomáticas y gran cantidad de cartuchos y municiones de guerra, autos de lujo y una millonaria suma de dinero en efectivo.
