Tras conocerse los datos del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos sobre la pobreza en todo el país en el primer semestre de 2024, tanto de la Universidad Católica Argentina (UCA) como de la Comisión Interna de ATE en el Indec salieron a cuestionar la metodología de medición y el festejo del Gobierno por la baja de los índices de pobreza y de la indigencia.
Para la UCA, el informe del Indec fue “un descenso sobrerrepresentado de la pobreza en Argentina”. Si bien remarcan que “esta buena noticia” se tiene que interpretar en el marco de un proceso de estabilización macroeconómica, con la desaceleración de la inflación y un menor incremento en los precios. Pero remarcaron que “es importante diferenciar entre el fenómeno de la pobreza y su instrumento de medición”.
“En contextos de alta volatilidad, tanto por fuertes incrementos en los precios como ante la desaceleración inflacionaria, la medición de la pobreza por ingresos tiende a ser menos precisa. Un análisis más cuidadoso de la serie estadística oficial sugiere que, aunque la caída de la pobreza es real, su magnitud se encuentra sobrerrepresentada” explicaron desde la Universidad.
En el mismo sentido, la UCA aclara que para la medición se sigue utilizando canastas básicas construidas sobre la estructura de consumo de 2004-2005, y que desde el 2024 hay “un escenario de fuerte recomposición de tarifas y de precios regulados” y que “dicha desactualización limita la capacidad de la medición para reflejar con precisión la situación efectiva de los hogares”.
La Universidad Católica admite las mejoras en los números pero advierte que “los datos oficiales sobrerrepresentan la magnitud del alivio social. Para corregir parte de este sesgo en la evolución de los indicadores de pobreza, el INDEC debería acelerar la actualización de las canastas de referencia, evaluar el impacto de los cambios en los instrumentos de captación de ingresos y transparentar su efecto sobre las series históricas”.
Nada que festejar, mucho para preocuparse
Por su parte, la Junta Interna de ATE en el Indec publicó un comunicado ratificando que Milei no sacó a 12 millones de personas de la pobreza, tal como suelen repetir los seguidores del gobierno Libertario.
En una serie de posteos en Instagran, los trabajadores remarcaron que se compara períodos incorrectos. En este sentido, señalaron que Milei asumió en diciembre de 2023 y realiza comparaciones con el primer semestre de 2024. “El gobierno hace el calculo como si hubiera sacado de la pobreza a quienes fueron llevados a esta condición por la devaluación de ese mismo mes y la consecuente inflación que ellos mismos generaron. El pico de pobreza en el primer semestre de 2024 es responsabilidad del actual gobierno” indicaron.
También señalaron que la cifra es incorrecta porque “la EPH (Encuesta Permanente de Hogares) posee una muestra que representa alrededor de 30 millones de personas que habitan las zonas más densamente pobladas del país. Esto significa que, para poder interpretar una salida de 12 millones de personas de la pobreza, la caída debería ser del 40% y eso no sucedió”.
“La relativa y precaria mejora en el indicador de pobreza, no tiene un correlato en una mejora general de los indicadores de mercado de trabajo, ni en un crecimiento de la economía” aseveraron los representantes de ATE, quienes además señalaron que la situación del INDEC es crítica y que el gobierno utiliza al organismo con fines electorales, mientras la salida de técnicos calificados es permanente debido a los bajos salarios.