Para poder desenvolverse eficazmente en el plano externo, los actores subnacionales necesitan establecer una relación de complementariedad con la Nación, y esa condición, cobra una importancia fundamental para la gestión del crédito directo internacional orientado a las provincias.
En ese sentido, el 20 de noviembre del año pasado, los antecedentes de Santa Fe y Córdoba favorecieron la firma por parte del gobierno nacional, de la garantía requerida en el contrato para el préstamo del Fondo Saudí, destinado a la realización de los bloques B y C de la mega–obra.
Del acto celebrado en la ciudad de Buenos Aires, participaron los gobernadores de Santa Fe y Córdoba, Maximiliano Pullaro y Martín Llaryora; el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo; y el Sultán Al-Marshad, CEO del ente Saudi Fund for Development.
El histórico vínculo de Santa Fe con el mundo árabe como catalizador del proyecto
La suscripción del acuerdo con el ente crediticio, no fue sino un paso más de un largo proceso iniciado mucho tiempo antes.
En el caso de Santa Fe, aparece en el año 1993, el antecedente histórico de constituir la primera contraparte prestataria del Fondo de Kuwait en toda América del Sur.
Aprovechando ese estrecho vínculo, durante el año 2019 y tres meses antes de prestar juramento como gobernador, Omar Perotti emprendió una gira por Kuwait y Emiratos Árabes Unidos para afianzar la relación con diferentes fondos árabes.
Ya iniciado el nuevo ciclo de gobierno que sucedió a la administración de Miguel Lifschitz, en el año 2020 se anunció el proyecto de obra del nuevo acueducto, destinado a la captación de agua del río Paraná para su transporte a través de localidades del centro–oeste de la provincia de Santa Fe, hasta la ciudad cordobesa de San Francisco.
Se trata de un proyecto de tal magnitud, que los pasos de los trabajos quedaron divididos de mayor a menor escala, en “etapas”, “fases” y “bloques”.
El inicio de la obra correspondió al bloque “A”, de la fase I, de la primera etapa. Este primer tramo de los trabajos incluía la estación de bombeo y la planta potabilizadora.
El objetivo trazado, fue beneficiar a 410.000 habitantes de 54 pequeñas localidades de ambas provincias, de las cuales 17 son santafesinas: Barrancas, San Fabián, Arocena, Coronda, Larrechea, San Eugenio, Gálvez, Gessler, Loma Alta, López, Campo Piaggio, Colonia Belgrano, San Martín de las Escobas, Traill, Cañada Rosquín, Casas y Las Bandurrias.
En tanto que la obra completa con la etapa II, prevé mejorar el suministro de agua apta para el consumo humano en un total de 83 localidades (incluyendo las ya mencionadas) para más de un millón de habitantes, con una inversión total de más de USD 440 millones.
Para el anuncio realizado el 21 de octubre de 2020, se organizó una videoconferencia encabezada por el presidente Alberto Fernández con la participación de los gobernadores de Santa Fe, Omar Perotti; y de Córdoba, Juan Schiaretti.
Durante la firma del convenio para un primer tramo de financiamiento de USD 50 millones para el bloque inicial de la obra, el jefe de la Delegación del Fondo Kuwaití, Tareq Al Menayes, expresó que “la función de este Fondo es que sea el catalizador para que otras instituciones se comprometan en la ayuda para los bloques B y C”.
El préstamo del Fondo Saudita para el Desarrollo
La concreción de un nuevo acuerdo entre Santa Fe y el Fondo Kuwaití, orientó la continuidad de la gestión financiera internacional hacia Arabia Saudita, más precisamente hacia su denominado “Fondo Saudita” creado en 1974 con el objetivo de brindar asistencia técnica y financiamiento a países en vías de desarrollo.
Como lo había propuesto la representación de Kuwait durante la firma del contrato entre su Fondo y Santa Fe y Córdoba, aquel antecedente atrajo el interés de la fuente saudita para ofrecer un crédito a las mismas provincias, también enfocado en la construcción del acueducto biprovincial.
En Octubre del año 2023, los gobernadores Perotti y Schiaretti viajaron a Riad para firmar el contrato de un préstamo de USD 100 millones, a amortizar en partes iguales, para financiar la continuación de los trabajos del acueducto. En la oportunidad, el mandatario santafesino destacó que se trató de “la primera operación del Fondo saudita en la República Argentina”.
La institucionalización de la gestión externa para la continuidad de la obra
Tras las aprobaciones del préstamo y de la garantía de la Nación, las actuales gestiones de Santa Fe y Córdoba acaban de anunciar que el 27 de enero del año próximo se realizará la licitación para la construcción de los nuevos bloques B y C, tramo de obra mediante el cual se llegará a un total de 43 kilómetros de la red troncal.
Por el tipo de diseño e implementación del proyecto, el acueducto biprovincial representa un hito, en una Argentina donde la mirada de largo plazo y la asociación tan efectiva entre Estados subnacionales suelen ser excepciones a la tendencia histórica del reseteo tan tentador y habitual durante cada cambio de gobierno.
En un contexto general de restricción sensible de toda la obra pública nacional, el ejercicio de una política de Estado por parte de los gobiernos de Santa Fe y Córdoba, consigue por un lado avanzar con una obra estratégica para el desarrollo, y por el otro, seguir en una posición destacada para la elegibilidad de parte de las grandes fuentes crediticias que posibilitan su financiamiento.
