El Gobierno Nacional sostiene que hay situaciones de marcada injusticia entre las 2.228 entidades deportivas sin fines de lucro que hoy están encuadradas bajo el esquema de beneficios en sus facturas de gas natural por redes, según datos de la Secretaría de Energía de la Nación.
En la provincia de Santa Fe hay 102 clubes barriales que a pesar de ya estar anotados bajo declaración jurada, tendrán que volver a hacerlo con un desconocimiento total de qué pautas seguirán para cubrir o no parte del consumo.
La resolución 276/2025 de la Secretaría de Energía de la Nación anticipa que habrá un nuevo empadronamiento y además faculta a la Subsecretaría de Transición y Planeamiento Energético para “establecer las pautas complementarias e interpretativas que permitan una adecuada focalización de los beneficios, incluyendo las acciones de revisión, evaluación, solicitud de información, registro y control previstas en la presente medida, y todas aquellas que resulten necesarias para su adecuada implementación” y su “posterior remisión” a los entes de control para su aplicación.
La reciente normativa ordena que si alguna institución proporciona información falsa en sus declaraciones juradas, perderá el beneficio y deberá devolver los importes bonificados, además de pagar intereses e incurrir en posibles sanciones adicionales.
La Secretaría de Energía fundamenta estos cambios en la necesidad de migrar de un esquema de subsidios energéticos generalizados a uno focalizado y sostiene que la política de subsidios masivos ejecutada en administraciones anteriores resulta insostenible y poco equitativa para el contexto de las cuentas públicas actuales.
Por su parte, el vocero presidencial afirmó durante su habitual encuentro con la prensa, que por años “los argentinos han financiado con subsidios a clubes de élite, profesionales o con fines comerciales”, que se encontraban inscriptos como si fueran clubes barriales.
En su exposición, Adorni ejemplificó la situación con casos como el de un club de regatas de Olivos, una institución de rugby ubicada sobre avenida del Libertador y un club de fútbol de la segunda categoría de la AFA, los cuales, según explicó, recibieron subsidios millonarios injustificados.
