En una muestra clara de cooperación institucional, los gobiernos de Chaco y Santa Fe desplegaron un nuevo operativo de control y vigilancia en el límite compartido, específicamente en el kilómetro 929 de la Ruta Nacional 11, a la altura de Florencia. Esta iniciativa interprovincial responde a la creciente demanda de respuestas concretas frente a delitos que afectan gravemente a las comunidades rurales, como el narcotráfico y el abigeato.
El operativo contó con la participación activa de la Gendarmería Nacional y las policías de ambas provincias. Por el lado chaqueño, encabezó la jornada el Ministro de Seguridad Hugo Martkovich, mientras que por Santa Fe asistieron funcionarios de alto rango de la Agencia Provincial de Seguridad Vial, entre ellos Carlos Torres, Mauro Bertorino y Sergio Guzmán.
La estrategia busca no solo disuadir a las organizaciones criminales que aprovechan las zonas limítrofes para operar, sino también brindar una señal clara a la ciudadanía: el Estado no está ausente. La cooperación entre jurisdicciones es vista como una herramienta fundamental para cerrar brechas de seguridad y garantizar presencia operativa en puntos históricamente vulnerables.
Más allá del despliegue logístico, lo que se fortalece es la confianza de los habitantes locales. La articulación visible entre distintas fuerzas públicas aporta previsibilidad, refuerza el tejido institucional y envía un mensaje inequívoco: ningún territorio está fuera del alcance de la ley. Esta política de seguridad integrada apunta a consolidarse como un modelo replicable en otras zonas conflictivas del país.
