En la víspera de su declaración ante la Policía Federal, el expresidente de Brasil Jair Bolsonaro entregó ayer, por orden del Tribunal de Cuentas de la Unión (TCU), el tercer juego de joyas que recibió en 2019 del reino de Arabia Saudita, valorado en más de 90.000 dólares y en el que estaba incluido un Rolex de oro con incrustaciones. 

El que fuera secretario de Comunicación del anterior gobierno, Fabio Wajngarten, informó de la entrega a través de su perfil de Twitter, donde aclaró además que estaban "dentro del plazo establecido" por el TCU. 

"La entrega reitera el compromiso de la defensa del presidente Bolsonaro de devolver todos los obsequios que solicita el TCU, cumpliendo con la orientación del expresidente del país, quien siempre respetó la legislación vigente en la materia", dijo Wajngarten. Hasta el momento se hizo público que Bolsonaro recibió al menos tres juegos de joyas por parte de Arabia Saudita. 

El expresidente fue convocado a declarar este miércoles ante la Policía Federal, según habían confirmado sus abogados el miércoles en un comunicado al canal GloboNews, donde aseguraron además que la citación será una oportunidad para aclarar el caso. 

A la espera de que comparezca, Bolsonaro podría ser acusado de malversación, así como de trato de favor, si hay sospechas de que los agasajos eran algún tipo de contraprestación. 

Tras regresar el jueves pasado a Brasil luego de permanecer tres meses en Estados Unidos, Bolsonaro fue citado por la Policía Federal para iniciar la investigación sobre la existencia de algún tipo de delito relacionado con las joyas saudíes. 

Se trata de un trámite protocolar para realizar el primer informe para elevar a la Justicia. El exmandatario había decidido ocultar las joyas en la mansión del extricampeón mundial de Fórmula Uno Nelson Piquet. 

Las joyas entregadas por el gobierno de Arabia Saudita a Bolsonaro en 2019 y 2021, y no declaradas ante la Aduana, fueron escondidas en la residencia de Piquet, uno de los principales defensores de la ultraderecha en Brasil, según documentos oficiales a los que accedió el diario O Estado de Sao Paulo. 

En la mansión que Piquet posee en el exclusivo barrio Lago Sur, en Brasilia, Bolsonaro guardó las pertenencias que recibió como jefe de Estado y de las que se apropió para su patrimonio personal, entre ellas un conjunto de joyas recibidas por parte de la monarquía saudita, dijo el diario. 

La defensa de Bolsonaro reconoció la semana pasada la existencia de ese tercer conjunto de joyas -luego de un escándalo con otros dos- y se puso a disposición para devolverlo al erario. Este conjunto de joyas fue recibido en mano por el propio Bolsonaro, señaló el portal de noticias G1, del grupo de medios brasileño O Globo. 

Este tercer "kit" incluía un reloj Rolex, una birome, gemelos y otros objetos de oro y brillantes y su valor está estimado en al menos 500.000 reales (más de 90.000 dólares). El primero incluía un collar que junto a otras joyas tenía un valor cercano a los tres millones de dólares, mientras que el segundo, que ya fue entregado al TCU, estaba valorado en poco menos de 200.000 dólares, informó la agencia de noticias Europa Press. 

Ambos fueron llevados al país en 2021 por una delegación encabezada por el entonces ministro de Minas y Energía, Bento Albuquerque, pero solo el primero fue interceptado en la aduana del Aeropuerto Internacional de Guarulhos, en San Pablo. 

Bolsonaro reconoció que la caja de joyas más cara, la de cerca de tres millones de dólares, era para su esposa, Michelle, y que intentaron varias veces recuperarla a través de la Receita Federal -agencia federal de recaudación de impuestos de Brasil y una secretaría del Ministerio de Economía- en donde continúa a la espera de que sea entregada a la Policía, tal y como fijó el TCU. El exministro Albuquerque ya declaró en el marco de la investigación de la Policía Federal. Una comisión del Senado resolvió investigar si el caso tiene relación con un supuesto soborno pagado para la privatización de la refinería de Petrobras Landulpho Alves, en Bahía, vendida a la mitad de su valor de mercado al fondo Mubadala, de Emiratos Árabes Unidos (EAU), que tiene participación saudita. 

Durante la gestión Bolsonaro, miembros del gobierno y parlamentarios oficialistas realizaron más de 100 viajes oficiales a Arabia Saudita, refirió el portal de la Transparencia del gobierno, citado por el portal Brasil de Fato.