Luego de casi ochos años de ausencia en los mercados de deuda en moneda extranjera, la Argentina logró captar u$s1.000 millones, con la colocación de un nuevo bono (Bonar 2029N) a cuatro años, emitido bajo legislación local y con un cupón del 6,5%. El rendimiento al precio de corte resultó en una tasa anual de 9,26%, levemente por encima de la que esperaba el equipo económico.
La licitación generó un marcado interés: se recibieron ofertas por más de u$s1.400 millones, provenientes de más de 2.500 inversores, impulsadas, en parte, por incentivos regulatorios decretados en los últimos días.
Con un precio de u$s91, el Tesoro obtuvo u$s910 millones, que prácticamente cubren los vencimientos de Bonares 2029 y 2030 en enero.
“La tasa es equivalente con un diferencial de 550 puntos básicos por encima de los bonos del Tesoro Americano de igual duración, o unos 100 puntos básicos por debajo del rendimiento de los bonos existentes con duración similar. Esto refleja el valor asignado a la estructura de mercado, con amortización íntegra al vencimiento y una demostrada confianza de los inversores en las mejoras de fundamentals económicos”, anunció Ministerio de Economía.
Se trata de un rendimiento algo mayor al que buscaba el ministro de Economía, Luis Caputo, quien este martes dijo en un encuentro con inversores, que pensaban conseguir financiamiento con un rendimiento final levemente por debajo o igual al 9% anual.
Entre los operadores se esperaba con confianza que el Gobierno lograra la colocación, cuyo producido irá a financiar las amortizaciones de Bonares 2029 y 2030, en enero de 2026. Ese vencimiento es de casi u$s1.200 millones. Quedarían otros u$s3.600 por resolver.
Pero más allá de que Buenos Aires esté ensayando una colocación pura en dólares, con bonos de legislación local, el equipo de Finanzas está poniendo en marcha un test más importante, que es ver la posibilidad de regresar a los mercados sin la necesidad de haber acumulado reservas internacionales. El rendimiento que ofreció el Bonar, todavía estaría algo caro para Nueva York.
Regreso de la Argentina al mercado de deuda en dólares: qué lectura hizo el mercado
Matías Waitzel, socio en AT Inversiones dijo que “el resultado de la licitación del Bono del Tesoro Nacional en dólares 6,50% 2029 finalmente estuvo en línea con lo que esperaba el mercado, lo que permite considerarlo como un buen punto de partida para futuras emisiones”. “En concreto, se adjudicaron u$s1.000 millones sobre un total de ofertas por u$s1.420 millones, lo que demuestra que la demanda fue sólida, aunque más moderada de lo que se rumoreaba. Este resultado ayuda a reconstruir cierta confianza de los inversores, al volver al mercado de deuda en dólares sin tensionar las reservas del Banco Central de la República Argentina, tal como lo planteó la autoridad”, explicó.
En ese sentido, dijo que “puede calificarse como ‘un buen puntapié’ para eventuales nuevas licitaciones”, y agregó que “en un contexto de búsqueda de refinanciamiento ordenado, el bono igualmente salió algunos puntos por debajo de la curva lo cual es una muy buena señal”.
En paralelo, el economista y socio de Adcap Grupo Financiero, Javier Timerman, aportó una lectura complementaria. Remarcó que, pese a las críticas por una tasa más alta que la de algunas provincias, la estrategia oficial es consistente: “El mercado se abre de a poco y se cierra de golpe. Empezar a trabajar con emisiones chicas y tasas apetecibles para inversores es la única forma de generar confianza. Es un proceso que lleva tiempo. Sin financiamiento NO hay economía que pueda crecer”.
Por su parte, Alan Versalli, analista de Research de Cocos Capital, evaluó el resultado como un hito relevante: “Como un primer acercamiento a los mercados internacionales, la verdad que está muy bien, sobre todo por la tasa. Implica un riesgo país de aproximadamente 550 puntos básicos, que es literalmente el objetivo que se había puesto el Gobierno para retornar a los mercados. En ese sentido, parece que dijeron: ‘tomamos dólares hasta esta tasa, no más; ese es nuestro objetivo’”.
Desde Sailing Inversiones, en tanto, indicaron que “la licitación confirma una colocación exitosa tras casi ocho años sin acceso al financiamiento voluntario en dólares”. “Si bien la tasa del 9,26% puede percibirse como elevada en términos absolutos, luce competitiva bajo legislación argentina cuando se la compara con las paridades y rendimientos actuales de los bonos soberanos de similar duration. El mercado convalidó un spread menor al de los títulos existentes precisamente porque asigna un valor adicional a la estructura bullet, que elimina incertidumbre de flujos intermedios y facilita el análisis de riesgo”, consideró la sociedad de bolsa.
En ese sentido, plantearon que “la operación no solo permite cubrir los vencimientos inmediatos de enero sino que también marca una señal de recomposición de confianza por parte de los inversores institucionales” y añadió que “el monto ofrecido de u$s1400 millones va en línea con lo esperado por el mercado”.
“Si bien el mercado valuaba este instrumento arriba del 10% según donde se ubica la curva local de Bonares, lo cierto es que el menor rendimiento logrado no sorprende y se explica por: 1) la valoración de la estructura del bono-bullet, pero sobre todo con cupón del 6,5%, a diferencia del resto de los bonares con cupones muy bajos-, lo que habilita un menor rendimiento comparado a una curva que queda algo distorsionada por cupones tan bajos; y 2) el efecto de los incentivos regulatorios recientes que impulsaron la participación de bancos y compañías de seguro”, analizó Eric Ritondale, economista jefe de PUENTE.
Fuente: Ambito






















