La Justicia rechazó el pedido de prisión domiciliaria presentado por Claudio Contardi, exmarido de Julieta Prandi, condenado por hechos vinculados a violencia de género. Según el fallo, el imputado deberá continuar cumpliendo la condena en un establecimiento penitenciario común.
El juez a cargo consideró que otorgar la detención en su domicilio podría poner en riesgo la investigación en curso y no garantizaría las medidas de seguridad necesarias para la víctima. Contardi había solicitado el beneficio alegando cuestiones de salud y familiares, pero la defensa no logró demostrar que estas circunstancias fueran suficientes para modificar la medida de detención.
Julieta, quien se expresó públicamente sobre la causa, recibió con alivio la decisión judicial, en un proceso que ha tenido amplia repercusión mediática y ha generado debates sobre la protección de las víctimas de violencia doméstica y el cumplimiento de las condenas.
El caso continúa bajo seguimiento judicial, mientras se esperan nuevas instancias de resolución que podrían definir medidas adicionales sobre el contacto y la seguridad de la víctima.
