En medio de la delicada situación deportiva e institucional que atraviesa Colón, Gustavo Abraham dialogó tras la reunión mantenida con la Comisión Directiva y remarcó que el partido del próximo domingo debe vivirse con tranquilidad y apoyo total al plantel.
“Colón tiene que hacer una fiesta, de eso no hay duda. No podemos cometer medio error porque nos puede costar la categoría. El que juega es Colón, no juegan nombres propios”, afirmó.
Abraham explicó que este martes mantendrán un encuentro con el plantel y, previamente, con autoridades del Ministerio de Seguridad para coordinar detalles de la organización. Además, adelantó que se firmó un acta para ratificar las elecciones del 30 de noviembre y otra nota dirigida al ministerio para garantizar el ingreso de bombos y banderas el día del partido.
El dirigente también confirmó que se evalúa adelantar la concentración del plantel a partir del jueves “por seguridad y tranquilidad de los jugadores”, y destacó la predisposición del oficialismo para trabajar en conjunto: “Hoy no hay espacio para personalismos ni individualidades, el objetivo es ganar el domingo y salir de esta pesadilla”.
Finalmente, Abraham apeló directamente a la hinchada: “Tenemos que dejar de ser un drama y volver a ser una fiesta. Los enojos pueden estar, pero ningún elemento contundente ni desmanes. Entre todos tenemos que empujar para lograr el objetivo”.
