Una dramática situación se vivió este sábado, cuando vecinos de calle Almonacid al 3700, dieron aviso a la central de emergencias 911 al advertir que un bebé había dejado de respirar.
Ante el alerta, un patrullero del Comando Radioeléctrico llegó al lugar donde una mujer en estado de desesperación les indicó que el bebé se encontraba dentro de la vivienda, en brazos de su padre.
Los policías ingresaron de urgencia al domicilio y constataron que el niño no respiraba. Sin perder tiempo, le practicaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP), logrando que el bebé recuperara la respiración a los pocos segundos.
La oficial Gisela Ruiz sostuvo al pequeño en brazos mientras se normalizaba su frecuencia respiratoria, en tanto que el inspector Víctor Broin solicitó por radio la llegada inmediata del médico y una ambulancia del SIES 107.
Minutos después arribó al lugar la ambulancia del SIES 107, cuyo médico asistió al bebé, identificado como Renzo, de un año, y dispuso su traslado al hospital Iturraspe.
En el nosocomio público, los médicos de guardia confirmaron que el niño estaba fuera de peligro, aunque indicaron que permanecería internado en observación para la realización de estudios de control.
La intervención fue informada a la Jefatura de la Unidad Regional I, desde donde felicitaron a los dos policías por el accionar rápido y eficaz que permitió salvarle la vida al menor.
Asimismo, la novedad fue comunicada al fiscal de Flagrancia en turno del Ministerio Público de la Acusación, quien solicitó un informe médico oficial sobre el estado de salud del pequeño Renzo a las autoridades del hospital Iturraspe.






















