Este jueves comenzó el juicio al excadete del Liceo Militar de Santa Fe, Martín Tomás Kunz, por el ataque ocurrido el 19 de agosto de 2022 y que terminó con la vida del chofer de una combi y siete cadetes heridos.
El tribunal está compuesto por Pablo Sebastián Ruiz Staiger (presidente), Lisandro Pedro Aguirre y María Celeste Minniti.
El fiscal a cargo de la acusación será Estanislao Giavedoni y el imputado será defendido por Virginia Inés Balanda de la Defensa Pública. En tanto, los querellantes serán Verónica Macón, Martín Daniel Recaman, Néstor y María Laura Oroño.
Tras los alegatos iniciales de este jueves, habrá testimoniales hasta el jueves 21 de agosto. Los alegatos de clausura fueron fijados inicialmente para el 22 y el veredicto el martes 26 de agosto.
El pedido de la querella
El Doctor Daniel Recamán, uno de los querellantes en la causa, dijo que al igual que la fiscalía pedirán la pena máxima, que es la prisión perpetua, contra Kuntz. El letrado raificó que según el informe preliminar el imputado siempre estuvo lúcido, ubicado en tiempo y espacio, descartando cualquier brote psicótico.
“Lo que nosotros entendemos fue que Kunz se encontraba a la vera de la Ruta 1 con un bidón de nafta que fue encontrado también en el lugar del hecho y una bolsa con pertenencias negras. Y en ese momento, cuando se detuvo la tráfic, se dirigió, ni sin mediar palabras, atacó al chofer para después secuestrar a todo el contingente y llevarlos según lo que expresaron las víctimas en Cámara Gessel hasta la localidad de Cayastacito” describió Recaman.
Por último, el querellante indicó que se desconoce el móvil del ataque y que “es algo que no hemos podido desentrañar hasta hoy”.
Ataque criminal
Martín Kunz fue imputado por el “homicidio calificado criminis causa” del chofer Rubén Isidro Walesberg (71), la “privación ilegítima de la libertad” de siete cadetes y la “tentativa de homicidio calificado criminis causa” de cuatro de ellos.
Kunz subió a la trafic que conducía Walesberg en el estacionamiento de una panadería de Colastiné Norte, le asestó apuñaladas en el cuello y lo empujó hacia el exterior del vehículo.
Luego uno de los pasajeros, bajo amenaza, condujo la trafic hacia el norte por la ruta 1, hasta que fueron interceptados en el kilómetro 6,5. Allí Kunz se entregó, sin ofrecer resistencia.
La fiscalía reconstruyó el ataque con los testimonios de las víctimas y de los ocasionales testigos.
