Durante el partido de la Selección Argentina contra Bolivia, uno de los momentos sin dudas más emotivos llegó cuando Sergio Torres comenzó a entonar las estrofas del Himno Nacional Argentino, frente al equipo Campeón de América en Brasil y con la vuelta de la gente a las tribunas después de un año y medio la pandemia que en nuestro país ya se cobró 113.000 vidas.

El cruce de sensaciones se vio graficado en la cara Lionel Messi durante la canción patria cantada por el artista emblema de la cumbia santafesina, y llegó a su punto cumbre con la llegada del verso que dice "sean eternos los laureles" celebrada a coro por los que pudieron copar de presencialidad el estadio Monumental.

Torres, de 55 años, fue invitado a participar de la apertura del encuentro del equipo de Scaloni contra los Verdes luego de que el líder metalero Ricardo Iorio fuera apartado a raíz de las críticas recibidas por sus expresiones más polémicas, ligadas al antisemitismo.

Se trata de de uno de los cantantes santafesinos de mayor recorrido en la música, ya que comenzó a los 13 años en Tropical Maracaibo y pasó luego por los emblemáticos grupos Los Palmeras y Grupo Alegría.

Poco a poco se ganó un espacio en el ambiente y el salto lo dio desde el Grupo Cali, donde grabó diversos éxitos de cumbia, y al tiempo armó su banda en "Sergio y los Dueños del Swing".

Su llegada al partido se dio después de ser el intérprete en una fiesta de Lionel Messi y, según contaron desde AFA, el mismo futbolista hizo el primer contacto para que esté en el Monumental, antes de dar dos shows en la ciudad bonaerense de Avellaneda.