Cada 6 de noviembre se conmemora en Argentina el Día de los Parques Nacionales, una fecha que recuerda la decisión de Francisco Pascasio Moreno, conocido como Perito Moreno, de donar en 1903 tres leguas cuadradas de sus tierras en la zona de Nahuel Huapi, en la actual provincia de Río Negro.
Su objetivo fue que esos territorios se conservaran “a perpetuidad” como espacios naturales destinados al estudio y disfrute de las generaciones futuras.
A partir de esa donación, en 1934 se creó oficialmente el primer Parque Nacional argentino, el Parque Nacional del Sud, hoy conocido como Nahuel Huapi, que sentó las bases del actual Sistema Nacional de Áreas Protegidas. La iniciativa fue pionera en América Latina y se convirtió en un emblema del compromiso argentino con la preservación ambiental.
Los Parques Nacionales hoy: diversidad natural y cultural
En la actualidad, más de 40 Parques Nacionales integran el sistema de áreas protegidas que administra la Administración de Parques Nacionales (APN).
Desde las selvas de Misiones hasta los glaciares patagónicos, pasando por los humedales del Litoral y las montañas del noroeste, estas áreas resguardan una enorme variedad de ecosistemas, especies y paisajes.
Pero los Parques no sólo protegen la naturaleza: también conservan la diversidad cultural de las comunidades originarias y criollas que habitan en esos territorios, junto a guardaparques y trabajadores que garantizan su preservación.
En este marco, la APN y la Asociación de Fotógrafos de Naturaleza de Argentina (AFONA) presentaron el libro: “Retratos. Naturaleza y cultura en nuestros Parques Nacionales”, un recorrido visual que busca acercar a la sociedad la riqueza natural y humana de estos espacios.
Con más de un siglo de historia, el sistema de Parques Nacionales es hoy un orgullo nacional, símbolo de identidad, pertenencia y compromiso con el futuro.
Parque Nacional Islas de Santa Fe
Ubicado en la provincia de Santa Fe, el parque abarca ocho islas fluviales sobre el río Paraná, donde el paisaje cambia constantemente al ritmo de las crecidas y bajantes del agua. Es un espacio donde la naturaleza y la historia se entrelazan, en un entorno cubierto de montes nativos y adornado por las flores de irupé.
Reconocido como Sitio Ramsar desde 2017, este parque nacional es un verdadero refugio de biodiversidad, con más de 150 especies de aves, mamíferos y reptiles propios del ecosistema del delta.
Además, posee un valor histórico singular: en estas tierras se estableció, en 1527, el primer asentamiento europeo en territorio argentino, fundado por Sebastián Gaboto.























