Un nuevo ataque aéreo ruso con drones de tipo Shahed y Geran-2 dejó un muerto en Odesa y al menos once heridos en Kharkiv, tras una serie de bombardeos lanzados entre la tarde del 5 y la madrugada de este 6 de mayo, según informaron fuentes oficiales ucranianas.
Las ofensivas, centradas en infraestructuras civiles, provocaron incendios, destrucción y cortes en el suministro eléctrico.
En Odesa, ciudad portuaria clave del mar Negro, los drones alcanzaron zonas del distrito urbano y generaron múltiples focos de incendio. Según un comunicado de la Fiscalía Regional de Odesa, un hombre de 29 años murió como consecuencia de “quemaduras térmicas fatales debido a daños en una línea eléctrica”. Otro residente, de 19 años, fue hospitalizado por intoxicación por productos de combustión.
El ataque también destruyó viviendas, una institución educativa, almacenes de una empresa privada, varias dependencias y automóviles, indicó el mismo reporte.
En declaraciones recogidas por la agencia Ukrinform, el alcalde de Chornomorsk, Vasyl Gulyayev, informó que una casa habitada por dos personas con discapacidad fue alcanzada, aunque sus familiares lograron evacuarlas a tiempo.
El gobernador de la región, Oleg Kiper, confirmó que se trató de un ataque masivo con drones kamikaze lanzados por las fuerzas rusas contra infraestructura civil.
En la región de Kharkiv, en el noreste del país, la ofensiva fue aún más amplia. Según el gobernador regional, Oleg Synegubov, Rusia utilizó al menos 20 drones Geran-2, ocho bombas aéreas guiadas KAB y siete drones FPV.
“Los ataques alcanzaron ocho puntos distintos en los distritos de Shevchenkivskyi, Kyivskyi, Industrial y Kholodnohirskyi”, precisó Synegubov en un comunicado en redes sociales.
Uno de los impactos provocó un incendio en el mercado de Barabashovo, el más grande de la ciudad. El fuego destruyó completamente 20 pabellones comerciales y causó daños en casi 80 más, según el informe oficial. En total, al menos 11 personas resultaron heridas durante las últimas 24 horas en distintos puntos de la región.
En la región de Kharkiv, en el noreste del país, la ofensiva fue aún más amplia. Según el gobernador regional, Oleg Synegubov, Rusia utilizó al menos 20 drones Geran-2, ocho bombas aéreas guiadas KAB y siete drones FPV.
En el distrito de Izyum, los drones rusos destruyeron 14 viviendas particulares. En Kupyansk, los daños incluyeron dos casas, un almacén y dos vehículos. En otros sectores de la región de Kharkiv también se reportaron daños a un parque de bomberos y ocho viviendas más.
Las fuerzas armadas ucranianas informaron que en las últimas horas se registraron intensos combates terrestres en las zonas de Vovchansk, Zagryzove, Novoosynovo y Glushkivka, donde las tropas locales lograron repeler al menos nueve ataques rusos.
El patrón de bombardeos nocturnos con drones se ha repetido durante los últimos meses, en medio de los intentos de Ucrania por establecer una tregua para iniciar negociaciones de paz. No obstante, las fuerzas rusas continúan atacando regularmente objetivos civiles, según denuncian las autoridades ucranianas.
Los ataques recientes elevan las preocupaciones sobre la situación humanitaria en estas regiones, donde la infraestructura básica se encuentra gravemente dañada y miles de personas viven bajo amenaza constante de bombardeos.(REUTERS/ EFE)