El Museo del Louvre sufrió este domingo un robo tan audaz como cinematográfico: tres hombres encapuchados usaron un montacargas para ingresar por los muelles del Sena, forzaron una ventana del primer piso y se llevaron nueve joyas pertenecientes a la colección de Napoleón y la emperatriz. La operación, que duró apenas siete minutos, dejó a Francia conmocionada.
El Ministerio del Interior francés informó que el robo se produjo a las 9:30, hora local -4:30 en Argentina-, y que los ladrones “evidentemente eran un equipo que había hecho exploración”. Aprovecharon las obras de construcción cercanas al museo para trepar con un montacargas hasta el primer piso, donde rompieron las vitrinas de la galería Apolo.
Según Euronews, las piezas robadas forman parte de la colección de joyas de Napoleón y la emperatriz, exhibidas en una vitrina dedicada a los soberanos franceses. Incluyen collares, broches y diademas de valor histórico incalculable. El famoso diamante Régent, de 140 quilates, permaneció a salvo.

La corona de la emperatriz Eugenia, robada esta mañana junto a otras ocho joyas de la colección del Louvre en París, fue encontrada dañada muy cerca del museo
Tras el robo, la Policía acordonó el edificio, evacuó a los visitantes y cerró las calles cercanas. Aunque no hubo heridos, testigos describieron escenas de pánico y confusión.
Con 8.7 millones de visitantes en 2024, el Louvre es el museo más visitado del mundo y un ícono cultural de París. No es la primera vez que sufre un robo: en 1911, la “Mona Lisa” fue sustraída en uno de los episodios más recordados de la historia del art
