El juez Fabián Lorenzini, a cargo del concurso de Vicentin, resolvió este martes 11 de noviembre de 2025 que Grassi S.A. fue la primera compañía en alcanzar las mayorías requeridas en el proceso de cramdown. La decisión, basada en el informe técnico de la sindicatura, marcó un paso decisivo hacia la definición del futuro de la agroexportadora santafesina.
El dictamen de los síndicos señaló que Grassi obtuvo 1.141 adhesiones válidas sobre 1.708, representando $85.362 millones —el 84,99% del capital computable—. La adhesión de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), registrada electrónicamente el 31 de octubre, resultó determinante para completar los apoyos necesarios y permitir la solicitud de homologación del acuerdo.
Lorenzini constató que Grassi fue la primera en notificar conformidades suficientes, conforme a los artículos 48 y 49 de la Ley de Concursos y Quiebras. Con esa verificación, el magistrado habilitó el plazo de cinco días hábiles previsto en el artículo 50 para que competidores o acreedores presenten impugnaciones fundadas.
El consorcio conformado por Molinos Agro y Louis Dreyfus Company también comunicó haber alcanzado las mayorías, pero su presentación no fue validada en esta instancia. Cualquier reclamo deberá sustentarse en la verificación de firmas o en la validez de las adhesiones contabilizadas.
La propuesta de Grassi plantea incentivos para productores que vuelvan a operar con la compañía y un esquema de recuperación para acreedores financieros que aporten nueva prefinanciación. Si no se presentan objeciones o el juez las desestima, se podrá dictar la sentencia de homologación que oficialice la transferencia accionaria y el control operativo de la empresa.
Con esta resolución, el proceso iniciado tras la cesación de pagos de Vicentin en 2019 entra en su etapa final, tras casi seis años de uno de los concursos más complejos y emblemáticos del sector agroindustrial argentino.





















