El Bayer Leverkusen recibió una noticia que nadie quería escuchar. Ezequiel “Equi” Fernández, una de las grandes promesas del fútbol argentino, sufrió una importante lesión en la rodilla izquierda que lo obligará a pasar un largo tiempo fuera de las canchas. Según confirmó el club alemán a través de un comunicado oficial, el volante estará inactivo entre siete y ocho meses, por lo que recién podría volver a competir a mediados de 2026.
El exjugador de Boca Juniors se lastimó durante la victoria por 2 a 0 frente al Friburgo, en un duelo correspondiente a la octava fecha de la Bundesliga. Corrían 22 minutos del segundo tiempo cuando Fernández fue reemplazado con visibles gestos de dolor, dejando el campo entre aplausos de los hinchas locales.
Horas después, los estudios médicos confirmaron lo peor: una lesión de ligamentos en la rodilla izquierda. Aunque no será necesario pasar por el quirófano, el proceso de rehabilitación será extenso y exigente. El tratamiento se llevará a cabo en el centro especializado Werkstatt, perteneciente al propio club.
La baja de Fernández representa un duro revés para el técnico Kasper Hjulmand, quien había encontrado en el argentino una pieza clave para el mediocampo. Desde su llegada en septiembre, proveniente del Al-Qadsiah de Arabia Saudita, Equi se había ganado rápidamente la titularidad y el reconocimiento de la prensa alemana por su despliegue y precisión.
Además, la lesión de Fernández se suma a la de su compatriota Exequiel Palacios, operado semanas atrás por un desprendimiento del tendón del aductor derecho, lo que deja al Leverkusen sin dos de sus volantes sudamericanos.
A sus 22 años, Equi Fernández vivía un momento de plenitud futbolística. Su adaptación al exigente ritmo de la Bundesliga había sido inmediata, y su nombre ya comenzaba a sonar como una futura alternativa para la Selección Argentina. Sin embargo, el infortunio lo obliga a dar un paso al costado, al menos por un tiempo.






















