El canciller austríaco, Karl Nehammer se mostró "pesimista" , tras la reunión que mantuvo con el presidente ruso debido a que la acumulación de tropas rusas en el este de Ucrania, donde la preparación de una gran ofensiva rusa, presagia una "escalada de violencia".
Con todo, Nehammer consideró importante este tipo de encuentros en persona con Putin para confrontarlo con las consecuencias de la guerra y hablarle con franqueza de la destrucción y el dolor causados.
Un cara a cara sin imágenes
Mientras que el mandatario austríaco ofreció dos ruedas de prensa tras encontrarse con Putin, en las primeras horas tras el encuentro no hubo ninguna reacción del Kremlin.
Del cara a cara a puerta cerrada sin ayudantes no se difundieron fotografías -por petición del Gobierno austríaco- y el Kremlin anunció que no publicaría ningún comunicado sobre la conversación, que se produjo en ruso con traductores.
Los ministros de Exteriores de la UE acordaron este lunes proporcionar asistencia financiera y un equipo de expertos a las Fiscalías de la Corte Penal Internacional y de Ucrania para ayudarles a documentar posibles crímenes de guerra cometidos por tropas rusas en ese país.
Confianza en Estambul
El jefe del Gobierno austríaco aseguró que Putin sigue confiando en el proceso negociador de Estambul, aunque los preparativos rusos para una gran ofensiva en el este de Ucrania no ofrecen ningún motivo para el optimismo para esos contactos.
Las conversaciones de Estambul, sostuvo Nehammer, son el único formato que existe actualmente para lograr avances en las negociaciones de paz, que permanecen estancadas.
"En general, no tengo ninguna impresión optimista que pueda traerles de esta conversación con el presidente Putin. Una gran ofensiva [en el este de Ucrania ] se está preparando", indicó el jefe de Gobierno sobre una reunión que duró unos 75 minutos. (Europa News)