Esta mañana, el director del Hospital Cullen, Bruno Moroni, actualizó el parte médico de Alejandra “Locomotora” Oliveras y declaró que se encuentra “estable” mientras cursa una “internación en una unidad de terapia intensiva”.
Luego de la operación realizada este jueves, el profesional señala que “su estado sigue siendo crítico con el pronóstico reservado” y remarca que “es importante mantener esta estabilidad, que los parámetros a nivel general se mantengan dentro de lo posible con la mayor estabilidad y la oxigenación que corresponda al nivel neurológico”.
Informan que el diagnóstico preciso que provocó el ACV isquémico es la “obstrucción a nivel de las arterias” que actualmente está controlada con “tratamiento médico permanentemente en terapia”.
Además, Moroni adelantó que “se va a ir adoptando esto de reducir la sedación para ver si reacciona”. Dentro de los factores favorables para su recuperación se destaca su edad, “su condición y su fuerza“, comenta el director del Cullen.
“Hoy en día se mantienen controlados y bien todos los otros parámetros”, subrayó.
Síntomas de un ACV isquémico
La sintomatología desencadenada por un ACV isquémico es altamente perceptible, tanto para quien lo padece como para quienes rodean al paciente.
Los síntomas más comunes asociados con esta patología son:
- – Pérdida de fuerza en uno de los miembros
- – Alteraciones de la visión y/o visión borrosa
- – Alteraciones en el habla en las cuales “la misma persona se da cuenta que quiere decir cosas y le cuesta”
- – Dolor de cabeza
- – Cefalea
Ante cualquiera de estos síntomas, “es fundamental la consulta rápida que nos permita con mayor anterioridad tomar conducta terapéutica” remarca Moroni.
