La familia de la niña que denunció un abuso en una escuela de Rafaela y la Mesa de la Infancia de esa ciudad pidieron que el personal masculino del Colegio San José no de clases ni esté presente en el establecimiento, al cumplirse un mes de la presentación judicial y aún sin demasiadas novedades sobre el presunto autor del hecho.

"Hay un abusador que está dando clases", sostuvo en Primera Mañana por LT9 Milagros Zbrun, integrante de la Mesa de la Infancia de Rafaela, al tiempo que señaló que "juntamos firmas para que se pueda correr al personal masculino hasta que se esclarezca la causa y hasta que encuentren al culpable".

Se trata del caso de una nena de 7 años que le manifestó a su madre a fines de julio que había sufrido un abuso en un baño de la escuela por parte de una persona que estaba vestido de profesor. Vale recordar que por el sistema de burbujas, el ingreso a estas instituciones estuvo muy restringido, más allá de las medidas de seguridad que siempre se toman para cuidar a los menores.

Sin embargo, el ahora exabogado querellante de la causa, Carlos Farías Demaldé, había señalado por LT9 una serie de irregularidades entre las que se incluían que en el lugar no funcionaba la cámara de seguridad ni el ingreso biométrico que se utiliza para controlar quién entra y sale.

Ahora, pasado más de un mes, familiares, amigos, vecinos e diferentes organizaciones de Rafaela están reclamando que todavía no se ha identificado a ninguna persona como sospechoso del ilícito, lo que se materializó en una nueva marcha realizada el sábado pasado.

"Los niños siguen teniendo clases con todo el personal masculino que estuvo el día que sucedió el hecho. Están dando clases normalmente. Queremos que se le de la tarea de dar clases por Zoom. Los hombres que estuvieron ese día fueron cinco. Tanto la niña y sus compañeritas confirmaron el hecho, es decir, que uno de esos cinco hombres fue la que abusó de ella. La menor reconoce que la persona tenía el uniforme de trabajo del Colegio (entre docentes y no docentes)", aseguró Zbrun.

Consultada sobre la marcha de la investigación, señaló: "Hay mucha desesperación, bronca y enojo porque pasó un mes y es como si hubieran pasado dos días. Sigue todo parado, las fiscales no dan respuestas, se tiran la pelota. La familia está desesperada y da mucha bronca que todavía no se reconozca quién fue y que no haya motivación para encontrarlo".

"Lo del abogado es bastante sospechoso. La familia se enteró a través de los medios de comunicación. Cabe preguntarnos qué pasó. Nunca fueron a decirles que renunciaban a la causa, menos el motivo", agregó.

Respecto a la respuesta de la escuela, aseguró que "no dio respuestas". "Supuestamente está a disposición de la Justicia, pero no hay una iniciativa donde aporten información o quieran resolver esto. No dan respuestas a nada. No funcionan supuestamente las cámaras. El registro de llegada, que es un aparato donde cada personal tiene que apoyar su digital, ese día no funcionaba. Deja mucho que desear. La familia recalca todo el tiempo que no están aportando nada", remarcó.

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