Un día después de sellar un acuerdo con Estados Unidos para reducir aranceles por 90 días, el presidente de China, Xi Jinping, advirtió sobre las “prácticas intimidatorias” y el “hegemonismo”, en su primer discurso tras la tregua comercial, durante la inauguración del IV Foro Ministerial China-CELAC, frente a los presidentes de Brasil, Chile y Colombia.
Aunque no mencionó directamente a su contraparte, sus declaraciones fueron interpretadas como una crítica velada a las medidas adoptadas por la Casa Blanca.
“No hay ganadores en las guerras arancelarias ni en las guerras comerciales. La intimidación o el hegemonismo solo conducen al autoaislamiento”, afirmó Xi, en un tono que combinó advertencias con llamados a la cooperación multilateral.
También aseguró que “grandes cambios, nunca vistos en un siglo, se están acelerando”, y que en ese contexto la unidad entre los países del Sur Global es indispensable.
El acuerdo
El acuerdo alcanzado ayer lunes en Suiza establece que Estados Unidos reducirá sus aranceles del 145 % al 30 % sobre productos chinos, mientras que Beijing bajará los suyos del 125 % al 10 % para bienes estadounidenses.
El pacto también suspende represalias no arancelarias y suaviza el régimen sobre los envíos ‘de minimis’, de menos de 800 dólares, al disminuir el arancel del 120 % al 54 %. Estas importaciones han sido fundamentales para plataformas como Shein, Temu y AliExpress.
Aunque la medida fue interpretada como una cesión de ambas partes, Xi evitó cualquier referencia a una concesión por parte de su régimen. Por el contrario, presentó a China como actor responsable, dispuesto a fortalecer la solidaridad con América Latina y el Caribe, región donde ha expandido su presencia en los últimos años.
“La independencia y la autonomía son nuestra gloriosa tradición. El desarrollo y la revitalización son nuestro derecho inherente. Y la equidad y la justicia son nuestra búsqueda común”, señaló el mandatario.
En el marco del foro, anunció una línea de créditos por 66.000 millones de yuanes (unos 9.200 millones de dólares) para los países de la CELAC, denominados en moneda china. La iniciativa forma parte de los esfuerzos de Beijing por internacionalizar el yuan y consolidar su influencia financiera en América Latina. (Reuters/ EFE)