La semana pasada se realizó una fiscalización de forma conjunta en un establecimiento de cría de animales en la zona rural de la localidad de Piñero, en el sur de la provincia de Santa Fe.
En dicha inspección se relevaron 3 trabajadores, de los cuales dos habían tomado conocimiento mediante aviso de ofertas laborales en las redes sociales, y tras comunicarse con el teléfono de contacto fueron trasladados por el titular del establecimiento con un transporte de su propiedad. Al llegar al destino, los trabajadores advirtieron que ninguna de las condiciones de empleo ofrecidas fue cumplidas.
Nicolas del Mastro, del Comité Nacional contra la Trata y Explotación de Personas, detalló por LT9 que en marzo ya habían hecho una inspección en el mismo campo, y que el empleador había mostrado resistencia y no asistió a una audiencia en el ministerio de Trabajo.
Y como las denuncias por las condiciones laborales seguían, se hizo una nueva fiscalización, con los resultados abajo descriptos (ver Explotación laboral). “Se labró el acta por explotación laboral y que generó la judicialización del caso”, sostuvo el funcionario en Primera Mañana.
Agregó que el empleador tenía cría de animales y transporte, y que ofrecía ciertas condiciones de trabajo que luego no cumplía. En este sentido, Del Mastro detalló que “encontramos a una familia con sus tres chicos viviendo en situaciones infrahumanas”.
“Hay que distinguir el incumplimiento de condiciones laborales con la explotación laboral. Cuando encontramos trabajadores que viven en su lugar de trabajo no hay descanso. En el caso de Piñero, vemos que había elementos que configuraban el delito de trata de personas con fines de explotación laboral”, sostuvo el funcionario.
En cuanto al grupo familiar rescatado, se supo que eran oriundos de una localidad ubicada en el límite con el Chaco y que realizan trabajos esporádicos en el ámbito rural.
Explotación laboral
Durante la fiscalización se confeccionaron actas de inspección de Indicios de Explotación Laboral de los organismos intervinientes, al corroborarse que los trabajadores estaban sin registrar y sin percibir remuneración alguna. Uno de los trabajadores que estaba allí desde hacía un mes, no tenía jornadas ni días de descanso y era sometido a diez horas de trabajo diarios. Trabajaban y vivían en condiciones de extrema precariedad y hacinamiento dentro de dos containers, casi sin alimentos y sin agua potable para el consumo y aseo personal. Carecían además de elementos de higiene y seguridad. También se encontraba en el establecimiento la familia de uno de los trabajadores, con tres niños muy pequeños viviendo en esas mismas condiciones y en un contexto de absoluta hostilidad, violencia y agresión de la patronal hacia los trabajadores, a quienes se amenazaba de forma constante para que no escapen del lugar.
Fue en esas circunstancias que el Delegado de la Dirección Operativa del Comité, realizó la llamada al 145. Inmediatamente intervino la Procuraduría de Trata y Explotación de Personas (PROTEX) que derivó la causa a la Fiscalía Federal N° 1 de Rosario. Éstos solicitaron y dispusieron de manera inmediata el allanamiento y rescate de los trabajadores y sus familias, y convocaron al Programa Nacional de Rescate y al Punto Focal de Santa Fe. El allanamiento se realizó el día jueves 7 del corriente, donde se dispuso la detección de una personal titular del emprendimiento agrícola ganadero, además del rescate de las personas explotadas.
De la misma participaron la Delegación Santa Fe Sur del RENATRE, la Agencia Territorial Rosario del Ministerio de Trabajo de la Nación, la UATRE y la Dirección Operativa del Comité Ejecutivo de Lucha contra la Trata y Explotación de Personas.
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