Los equipos técnicos del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) en Los Antiguos, Santa Cruz, en conjunto con el laboratorio de IOT (Internet de la cosas) del INTA Balcarce, Buenos Aires, desarrollaron un dispositivo para evitar el congelamiento del agua de los bebederos para ovinos.
El Bebedero Térmico Ovino (BeTO) es una tecnología que funciona con energías renovables y suministra agua a demanda incluso a -22 °C.
Esta innovación representa una solución significativa para un problema histórico de los encargados de la ganadería en las regiones más frías de nuestro país.


El prototipo fue testeado en condiciones reales, luego de tres años de trabajo conjunto. El jede de la agencia de Extensión Rural Los Antiguos explicó “el Bebedero Térmico Ovino fue probado en condiciones reales en un establecimiento ganadero del Noroeste de Santa Cruz. Los ensayos demostraron la viabilidad del prototipo y la rápida aceptación por parte de los animales”.
La problemática no solo afecta a los animales que no pueden acceder a la bebida cuando lo requieren, sino también al personal, que se ve obligada a romper el hielo que se forma en los bebederos de manera manual durante las jornadas de trabajo.
“El bebedero, si bien está pensado para dar una solución al clima patagónico y el congelamiento de las fuentes de agua, puede implementarse en cualquier región, ya que evita también la evaporación en zonas de mucho calor y asegura agua filtrada y tratada, aportando al cuidado y la sustentabilidad del medio ambiente”, señaló Marcos Clemente, investigador del INTA Balcarce.
Esta innovación pretende ser llevada al mercado a través de acuerdos de transferencia tecnológica con una empresa regional.
